La palabra fobia en el lenguaje cotidiano es temor intenso a algo. Las fobias están incluidas dentro de los trastornos de ansiedad y se suelen clasificar de la siguiente manera:
• Trastorno de pánico con agorafobia
• Agorafobia sin historia de trastorno de pánico
• Fobia social
• Fobia especifica
Ahora vamos a explicar estos términos con ejemplos cotidianos y así poder ver si tenemos algún problema relacionado con este trastorno.
AGORAFOBIA
Es el más común e incapacitante en la clínica; es un temor a lugares públicos como salir a la calle, ir de compras, utilizar transportes públicos y estar en lugares donde haya mucha gente.
También puede aparecer miedo a los ascensores, coches, puentes y espacios cerrados. Normalmente las personas que tienen estos miedos, ven que se acrecientan cuando están solos.
La agorafobia puede darse con trastorno de pánico o no. Cuando este se desencadena el sujeto presenta, sudoración, palpitaciones, mareos, disnea, sequedad de boca, miedo a sentirse atrapado, volverse loco e incluso morir.
FOBIA SOCIAL
Es un miedo a lo que piensen los demás; una incapacitación para relacionarse y comportarse cuando se está en grupo. La persona siente miedo a ser humillado o criticado.
FOBIA ESPECIFICA
Cuando la persona siente miedo en una situación determinada (ascensores, alturas, sangre, inyecciones…)
Las diferentes situaciones presentadas pueden dar lugar a incapacitar a las personas a llevar una vida normal, tanto a nivel laboral, familiar o personal.
Para poder tratar todos estos trastornos lo primero que tenemos que hacer es un diagnostico diferencial para saber exactamente que es lo que tenemos delante.
Cada trastorno requiere un tratamiento personalizado a su tipo de miedo.